La propuesta gastronómica de este emprendimiento nos daba ya indicios de un estilo mexicano, además, nuestro cliente soñaba que su negocio luciera así.

A simple vista se visualizaba el uso de catrinas, calaveras, flores, Frida Kahlo, entre otros personajes y elementos tradicionales en este estilo. Nosotros quisimos componer un estilo basado en la cultura popular mexicana para darle un aspecto de fonda, de comida callejera, del mural de barrio, de mercadito popular, donde se habla y se escucha expresiones o modismos propios de la cultura mexicana.

Claramente no se trata de un restaurante gourmet, aquí se vende comida rápida y el local tiene que transmitirlo. El proyecto ya está puesto en marcha y nos encanta ver cómo se están cumpliendo los objetivos de nuestro cliente, tener un espacio donde la gente disfrute su botana a lo mero mero.